¿Tienes una buena idea y quieres llevarla a cabo? Conoce las 5 claves para alcanzar el éxito de tu negocio sin descuidar a tu familia.
Los hábitos que practiques diariamente no solo te ayudarán a alcanzar el éxito de tu propio negocio si eres una mamá emprendedora, también te ayudarán a dar un excelente ejemplo a tus hijos y motivarlos para que en el futuro sean también profesionistas exitosos.
Planificación: Organiza un programa de trabajo, calendariza actividades y establece prioridades en las distintas tareas que implica tu negocio. Esto es fundamental para lograr tener orden y estructura en tu doble vida (maternidad y profesión).
Es importante que aprendas a diferenciar los tiempos que pasas con tu familia y los tiempos que dedicas a tu trabajo. Mientras mayor planificación tengas, mejores resultados obtendrás.
Algunas herramientas que te pueden ayudar a planificar son:
Comunicación asertiva: Organiza un plan de comunicación básica para dar a conocer tus productos o servicios. Puedes utilizar las redes sociales como un excelente medio. Es muy importante que mantengas un buen diálogo con tus clientes y con tus prospectos.
Red de negocios: Establece y define tu principal red o redes de negocios. Analiza muy bien cuáles son las que verdaderamente funcionan para tu tipo de negocio y tus productos, de esta manera no perderás tiempo destinado a redes que no te den resultados. Es mejor enfocar tus esfuerzos a pocas redes de negocio (funcionales) a tratar de estar en todos los eventos a los que seas invitada.
Algunos círculos de mamás, círculos de amigas, grupos en redes sociales, grupos de whatsapp, pueden ser buenas opciones. Recuerda: ANALIZA MUY BIEN LOS RESULTADOS.
Proactividad e iniciativa: Al tener tu propio negocio tú serás tu propio jefe. Exígete a ti misma, ten la seguridad de que puedes alcanzar tus metas. No esperes a que los demás resuelvan las cosas por ti, es tu negocio y depende de tu iniciativa.
Objetivos: Establece objetivos claros, concretos y lo más importante ALCANZABLES. Esto te ayudará a tener una visión clara de las metas que quieres lograr. No importa si no son enormes objetivos, la clave es ir paso a paso.
Cada momento que pasa, más me motivo a echarle porras a otras mamás que sé que tienen una situación a la mía… así que ¡ánimo y a darle duro!